Diseño de tres productos editoriales: revista, periódico y libro como herramienta para la preservación de la cocina tradicional mexicana basada en plantas.

Diseño editorial: principios, herramientas y función El Diseño Editorial es la estructura y composición que forma a libros, revistas, periódicos, entre otras piezas. Cada tipo de publicación tiene necesidades de comunicación particulares. El Diseño Editorial permite maquetar y componer publicaciones logrando armonía entre texto, imagen, diseño y maquetación otorgando impacto visual a la información a comunicar. El autor Andrew Haslam, en Creación, diseño y producción de libros menciona que, “El diseño es una mezcla de decisiones racionales y conscientes que se pueden analizar y de otras subconscientes menos fáciles de definir, ya que surgen de la experiencia y la creatividad de cada diseñador”. (Haslam, 2007, p. 23). Las publicaciones editoriales tienen como objetivo principal comunicar y transmitir información a través del buen manejo los elementos contenidos. Cada tipo de publicación tiene sus especificaciones desde lo estético hasta el contenido, derivadas de los objetivos editoriales y según a qué tipo de público va dirigida la publicación, aspectos sociales, culturales, políticos, ambientales, género, entre otros. La aspiración final de casi cualquier muestra de diseño editorial es comunicar una idea o contar una historia mediante la organización y presentación de palabras (dispuestas en destacados y cuerpo de texto) y de imágenes. Cada uno de estos elementos desempeña una función diferente. (Caldwell & Zappaterra, 2014, p. 8) Etapas del Diseño Editorial El proceso del diseño editorial pasa fundamentalmente por cuatro etapas generales: creación, edición, producción y diseño. Definido el tipo de publicación, se procede a trabajar el estilo. La tipografía que se usará, tipo de papel, gramaje, tamaño, organización del texto, titulares, entre otros. Es la etapa más productiva en términos de creatividad. Se define una idea, y en la edición se pule y da forma, es donde todos los elementos se concretan. En esta etapa se determinan los espacios desde el tamaño y proporción de las hojas, hasta el acomodo visual de los elementos (tamaño de las fotos, columnas, espacios blancos, tonalidades, numeraciones, etcétera) para generar una mejor solución estética y funcional. Por último, viene la etapa de la producción, donde todo lo anterior se materializa. La parte textual y gráfica se funden y forman un solo cuerpo, y todos aquellos elementos antes puestos en el papel, son plasmados definitivamente.