La reina del monopolio

ELSAH ARCE URIBE

“El que come solo, muere solo”, este dicho es una peculiar forma de explicar que la gente que no le gusta compartir se quedará sola. ¿Será cierto? ¿Aplicará para todos los casos? Algunas ocasiones, calificamos a las personas que no comparten como egoístas (en México se les dice “codas”) y de poca empatía. Por lo tanto, quedarse solo se entiende como un castigo para éstas. En la naturaleza, esta clase de comportamientos es algo cotidiano y tienen como finalidad ganar los recursos limitados como la comida. Conseguir recursos, que pueden ser alimento o refugio, es esencial en la vida salvaje. Generalmente se encuentran escasos y no todos los animales pueden obtenerlos. En consecuencia, se origina la competencia y los involucrados pelean y en algunos casos pueden sufrir daños físicos. Pelear es costoso, no sólo se puede salir lastimado, sino también es demandante en términos de energía, por lo que algunas especies han adaptado diferentes estrategias para obtener recursos. Una de ellas es acapararlos y evitar que otros los obtengan. A eso se le llama monopolio.

Tipo de documento: Artículo

Formato: Adobe PDF

Audiencia: Público en general

Idioma: Español

Área de conocimiento: BIOLOGÍA Y QUÍMICA

Campo disciplinar: CIENCIAS DE LA VIDA

Nivel de acceso: Acceso Abierto