La regulación emocional como factor protector de la ideación suicida: Una intervención en la escuela

LILIÁN PAMELA GARDUÑO RAMÍREZ

Aunque las tasas de suicidio varían de una región a otra se estima que una persona se suicida cada 40 segundos en el mundo (Ritchie et al., 2020), cifras que pronostican crecimientos con la presente pandemia por COVID-19 (Organización Panamericana de la Salud [OPS], 2020). Por ello, la Organización Mundial de la Salud (OMS, 2014, 2019b) se ha pronunciado preocupada por las tasas de suicidio en el mundo, un problema de salud pública que afecta principalmente a los jóvenes de 15 a 24 años. Aunque no es exclusivo de este grupo etario pues también se constituye como un problema que está perturbando la infancia de miles de personas al considerarse como la 4a causa de muerte entre los 10 y 19 años en América Latina y la 5a causa en niñas y niños de 5 a 14 años en México (Instituto Nacional de Estadística y Geografía [INEGI], 2022a, 2022b; OMS, 2019a; OPS, 2016; Ritchie et al., 2020; World Health Organization [WHO], 2020). Así, en la República Mexicana se lograron registrar 7896 suicidios en 2020 representando un incremento del 23% en un quinquenio con una tasa de 6.2 suicidios por cada 100,000 habitantes, en su mayoría con escolaridad primaria y secundaria. Dentro de estos números existen 230 individuos, 3%, de 10 a 14 años (INEGI, 2022a). Esta información solamente implica los suicidios registrados y consumados, pero se calcula que por cada suicidio existen tres intentos y por cada intento hay ocho personas con ideación o deseo suicida (Instituto Nacional de Salud Pública [INSP], 2019; Miranda de la Torre et al., 2009; Valdez-Santiago et al., 2019; WHO, 2014). Lo que lleva a considerar que de esos 230 menores que consumaron el suicidio existen 5520 infantes con ideación. Así, estudios en el país demuestran la presencia de ideación suicida en 5% a 15% de los individuos de 11 a 18 años (Arenas-Monreal et al., 2022; González-Forteza et al., 2015; Hernández-Cervantes, 2007; Valdez-Santiago, Villalobos, et al., 2021). En el caso de la población estudiada, la presente investigación identifica en 71 infantes de entre 9 y 11 años de la región centro del país la presencia de ideación suicida en el 11.3% e intentos suicidas con riesgos moderados y altos en el 14%. El 55% de los individuos presenta niveles de riesgo moderados y altos para la conducta suicida, con especial atención al factor de sintomatología depresiva moderada y elevada presentada en el 71% de menores. Estas cifras representan no solo al individuo sino a sus familias, comunidades y al desarrollo económico y social de los países pues los espacios sociales se ven trastocados por la pérdida o el duelo, la precipitación de conductas suicidas en otros, la discriminación, los costos de tratamientos en salud, las afectaciones en rendimiento y la pérdida productividad económica y de recursos humanos (OMS, 2013; Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia [UNICEF], 2021; WHO, 2014).

Tipo de documento: Tesis de maestría

Formato: Adobe PDF

Audiencia: Investigadores

Idioma: Español

Área de conocimiento: HUMANIDADES Y CIENCIAS DE LA CONDUCTA

Campo disciplinar: PSICOLOGÍA

Nivel de acceso: Acceso Abierto